Salta:
Seis mil litros de agua por hora para las mineras chilenas
Según un informe de Minería, que salió a luz ayer, bombearían hasta 6.000 litros por hora
a Chile
19 de abril del 2008
Quienes dicen que el agua será dentro de algún tiempo un recurso más
estratégico que el petróleo, se equivocan. El agua "ya es" entre
todos los recursos, el más vital, estratégico y preciado. Cómo se explica de
otro modo que hoy en la Puna
salteña esté a un paso de consumarse un proyecto que en el Norte chileno
redituaría 5.700 millones de dólares en 20 años, pero que de este lado de la
cordillera podría dejar los acuíferos andinos tan secos como los de Punta Negra
y Monturaqui, hoy agotados en Atacama ante los consumos industriales de la
gigante del cobre La Escondida.
Un proyecto elaborado por una inversora de Santiago de Chile,
El Alamo, y que dio origen una iniciativa privada en la que algunas empresas de
existencia real y otras sospechadas de ser "sellos de goma"
incurrieron en un sinnúmero de faltas e irregularidades con las cuales
mantuvieron oculto un plan de "exportación de agua industrial" para
consumos mineros en la región de Antofagasta.
El expediente que examina desde ayer la Unidad Revisora de
Contratos (UNIREN) no deja dudas sobre el destino de exportación pretendido
para el agua de los pozos que comenzaron a perforarse a fines de 2007 en
Quebrada del Agua, Laguna Socompa, el Salar de Llullaillaco y el Salar de Río
Grande, a escasa distancia de la línea cordillerana que separa a Salta de
Antofagasta.
Estas perforaciones fueron paradas el 17 de febrero por la Secretaría de
Recursos Hídricos que, sin embargo, volvió a autorizar su continuidad. Esta
decisión se explicó con un resolución del Ministerio de la Producción por
la cual la firma que llevaba adelante las tareas acreditó que se hallaba
habilitada desde abril de 2007
a realizar evaluaciones hidrogeológicas destinadas a
alumbrar aguas subterráneas para "uso minero, agrícola y agroindustrial en
los departamentos Los Andes y La
Poma".
El 6 de diciembre, a través del decreto 3679, la Provincia declaró
cumplidas las metas que la citada empresa había comprometido en favor del
desarrollo de la Puna
salteña.
Entre fines de diciembre y comienzos de enero, sin embargo, se avanzó con
perforaciones que dejaron traslucir un plan de "exportación", pero de
estas excavaciones, la autoridad de aplicación del Código de Aguas dijo haberse
enterado "ya cuando los pozos estaban casi terminados". La lista de
supuestas faltas cometidas a las leyes y resoluciones vigentes es más larga que
el acueducto que BHP Billiton, el grupo australiano que explota La Escondida, espera ver
trazado por Socompa en pocos meses más. La UNIREN tendrá la palabra final, pero desde los
más altos niveles de la
Provincia se aseguró que no se permitirá que el agua de la Puna sea desviada para
consumos mineros en el Norte chileno.
Ninguna ley en la Nación
ni en la Provincia
considera la posibilidad de una "exportación de agua" como la que las
grandes corporaciones mineras de la región de Antofagasta pretendieron imponer
sin éxito desde Potosí (Bolivia) y ahora desde Salta. En el medio, recordemos,
otro proyecto de extracción calcado a los anteriores fuera rechazado en octubre
de 2007 por la chilena Comisión Regional de Medio Ambiente (COREMA), para evitar
que las comunidades campesinas y la vida silvestre se vean seriamente afectadas
solo para que la minería de Atacama abarate los costos de producción de su agua
industrial y acreciente las ganancias del cobre.
Las cifras
170,4 millones de metros cúbicos anuales es el bombeo máximo que el proyecto
prevé desde la Puna
salteña hacia las mineras de Atacama.
6.000 litros por hora llevarían los dos acueductos que se desprenderían desde
Socompa y Sico hacia La
Escondida y Chuquicamata.
1,5 dólares es el valor que las empresas asociadas en el proyecto cobrarían por
cada metros cúbico trasvasado desde la
Puna salteña hacia Atacama.
8 pozos en el primer año, 21 en el segundo, 22 en el tercero, 20 en el cuarto y
19 en el quinto año prevé el plan elaborado en Chile
en 2000.
203 millones de dólares es la inversión estimada para el acueducto que
abastecería a La Escondida
a través de Socompa.
224 millones de dólares es el costo estimado del acueducto que abastecería a
Chuquicamata a través de la línea de Sico.
Un informe lapidario
Un informe que elevó la asesoría jurídica de Minería el pasado 18 de febrero
expone una presentación complementaria en la que Servicios Mineros -una de las
empresas asociadas tras el plan alentado por BHP Billiton- sostuvo que el
proyecto "permitirá dar cumplimiento al Tratado sobre Complementación
Minera celebrado entre las Repúblicas de Chile y Argentina, facilitando los
procesos de integración y cooperación económica regional a fin de lograr una
fluida circulación de bienes y servicios y factores de producción en el
área".
El Tratado
Los intereses asociados tras el plan que aún sigue latente en los Andes tienen
sus fichas apostadas al Tratado de Complementación Minera que se firmó en
1997 con Chile, durante la presidencia de Carlos Menen, y que fue ratificado
por los parlamentos de ambos países. Esteban Tomic Arrazuriz, concejal de
la Comuna de Las Condes y presidente
de la Consultora Dos
Mundos, expuso cuál es la visión de las mineras: “las empresas mineras estarán
en condiciones de negociar con la contraparte argentina dos cosas que son
de interés primordial para ellas: el acceso a los recursos hídricos, que en
Chile son escasos y en Argentina abundantes, y la posibilidad de depositar
en territorio argentino, que es más extenso y por tanto más apto que el chileno
para ese fin, sus ripios, desmontes y relaves".
FUENTE: Diario El Tribuno de Salta