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DE ENERO DE 1822
SE
PROHIBEN LAS CORRIDAS DE TOROS EN LA BUENOS AIRES COLONIAL
Por Elena
Luz González Bazán especial para Villa Crespo Digital
4 de enero del 2019
Las corridas de
toros, que se habían realizado desde 1619, convocaban por igual
a ricos y pobres. En 1791 el virrey Arredondo inauguró la pequeña
plaza de toros de Montserrat (ubicada en la actual manzana de 9 de julio
y Belgrano) con una capacidad para unas dos mil personas.
Pero como fue quedando
chica se demolió y se construyó una nueva plaza para 10.000
personas en el Retiro en la que alguna vez supo torear Juan Lavalle.
En la prolongación de las calles actuales Avenida Santa Fe y
Marcelo T. de Alvear, entre Florida y Maipú se construyó
la segunda plaza de toros que tuvo Buenos Aires.
Era mucho más
grande que la anterior y fue inaugurada el 14 de octubre de 1801. Era
de forma octogonal y estilo morisco con ladrillos a la vista. Esta plaza
de toros fue escenario de una valiente defensa por parte de las tropas
españolas cuando los ingleses las asediaron durante horas en
1807.
En el año
1819 el gobernador de Buenos Aires, Juan Martín de Pueyrredòn,
ordena que se derribe la Plaza de Toros.
El 4 de enero de
1822 se prohíben definitivamente.
Este espectáculo
fue traído desde España, con la conquista realizada en
nuestro continente.
Un espectáculo que fue prohibido en 1822. La primera plaza fue
construida por el carpintero Raimundo Marino, en el hueco de Monserrat,
en la actual manzana comprendida entre las calles Belgrano, Lima, Moreno
y Bernardo de Irigoyen. Con una capacidad para 2.000 personas, las autoridades
coloniales se instalaban en los balcones de la casa de la familia Azcuénaga,
en la conocida, en aquellos tiempos de la Calle del Pecado.
Con un público avieso, se fue armando un mundo de pulperías,
casas de juego, posadas que frecuentaban changarines, carreteros, negros
libertos y otros marginales.
Los toros
eran traídos desde Chascomús y si quedaban empantanados
por lluvias u otros problemas, se armaban corridas en el lugar.
En 1799 el virrey Avilés decide la demolición de esta
primera plaza de toros.
La nueva plaza se construyó entre el 22 de octubre y el 29 de
julio de ese mismo año y en 1801, el Cabildo resolvió
hacer edificar una nueva y definitiva plaza en el Retiro, el encargado
de los planos y trazado fue Martín Boneo, arquitecto y marino
español.
La plaza
costó 42.000 pesos y fue inaugurada el 14 de octubre de 1801.
Entre los hombres de mayo que concurrían se enumeran a Saavedra,
Moreno y Paso.
La construcción era octogonal, con la mampostería revocada
en cal, madera interior y todo lo parecido a las plazas que había
en España.
Se conoce que en este lugar y a partir de las Invasiones inglesas se
desarrollaron combates y las estructuras quedaron con serios problemas.
Posteriormente, y con la Revolución de Mayo en marcha y la Independencia
declarada, la plaza de toros ya recorría su final. Igual en Córdoba
y en otros espacios coloniales.
El 10
de enero de 1819 se hace la última corrida y posteriormente se
decide la demolición de la plaza de toros y su circo mediático
de la época.
Bartolomé Mitre quien fuera presidente y el fundador del diario
La Nación, pronto a cumplir los 150 años de existencia
expresaba: “Las corridas de toros, condenadas por la civilización,
fueron abolidas por la revolución argentina, como la inquisición,
el tormento y otras costumbres abusivas.
FUENTES: arcon de
buenosiares, diario La Nación, otras fuentes y fuentes propias.
Caracteres:
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DE ENERO DE 1870
EL
DR. BARTOLOMÉ MITRE FUNDA EL DIARIO LA NACIÓN
Producción
periodística Villa Crespo Digital
6 de enero
del 2011
Bartolomé
Mitre nació en Buenos Aires en 1821. Fue un hombre de estado,
líder militar e historiador. Mientras era joven, sus puntos de
vista políticos y sus escritos le valieron la enemistad con Juan
Manuel de Rosas.
Luego
de ser exiliado en Chile, Bolivia y Perú, Mitre volvió
a la Argentina en 1852 y participó en el derrocamiento de Rosas
realizada por el General Justo José Urquiza. En 1853 Mitre fue
designado Ministro de Guerra del gobierno provincial de Buenos Aires
y a través de este puesto, intentó resistirse al plan
de Urquiza de unir la provincia a la proclamada República Argentina.
En 1859
las tropas, bajo el mando de Mitre, fueron derrocadas por las de Urquiza
y Buenos Aires se unió a la Federación. Mitre fue declarado
Gobernador de la Provincia de Buenos Aires en 1860 y derrotó
a Urquiza en la batalla de Pavón en 1861.
Al siguiente
año fue elegido por un período de 6 años, como
Presidente de la República. Desde su gobierno realizó
una obra de organización (faltaba aún constituir sectores
enteros del estado, como el Poder Judicial) y de progreso: extendió
las comunicaciones ferroviarias, organizó la enseñanza
secundaria, comenzó la preparación de los códigos.
A la vez
debió vencer las últimas resistencias que el orden constitucional
levantaba en las provincias. Más grave fue la guerra del Paraguay,
que a partir de 1864 reclamó las energías del gobierno;
la lucha no había concluido cuando Mitre dejó el poder.
En 1872
aceptó la embajada en el Brasil, pero en 1874 y en 1891 fue derrotado
en la carrera para la presidencia. A su actividad de militar y gobernante
se sumó la de publicista y escritor. Desterrado en Bolivia fundó
el diario La Época, y ya en Buenos Aires, Los Debates, La Nación
Argentina, y La Nación en el año 1870, donde puso al servicio
de sus ideas una prosa sobriamente eficaz. Fue orador elocuente: su
mejor pieza es el discurso de recepción de los restos de Rivadavia.
Bartolomé
Mitre fue historiador: en la Historia de Belgrano y de la Independencia
Argentina del año 1857 y, cuya edición definitiva se publicó
en 1876-1877, sigue el proceso de crecimiento de la sociedad rioplatense,
que conduce lentamente a la Revolución y examina la lucha revolucionaria
y sus turbulencias.
La Historia
de San Martín y de la Emancipación Sudamericana (1887-1890)
explica el ideal ético-político que guió a la revolución
argentina.
Bartolomé
Mitre falleció en el año 1906.
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DE ENERO DE 1938
SE
INAUGURA EN BUENOS AIRES LA CASA DEL TEATRO
Producción periodística Villa Crespo Digital
6 de enero
del 2011
La impulsora
de esta iniciativa fue la ex cantante lírica portuguesa Regina
Pacini de Alvear (1868-1942), esposa del presidente Marcelo T. de Alvear.
Esta es la primera institución del mundo que alberga a actrices
y actores en su pensionado gratuito, otorgando asistencia social integral
a los artistas carecientes de medios económicos.
La Casa
del Teatro, institución de tanta importancia para los actores
argentinos, ofrece al público la posibilidad de visitar su pequeño
museo, que cuenta con dos salas, que se describen a continuación.
Sala Regina Pacini de Alvear: conserva elementos que pertenecieron a
la Sra. de Alvear, creadora de la Casa del Teatro. Entre ellos, fotografías
de cantantes de ópera y directores de orquestas, libros y recuerdos
de su estada en Francia, como así también documentos fotográficos
del comienzo de la Institución.
Sala Carlos Gardel: exhibe documentos personales, fotografías,
objetos, cartas y ropa del inolvidable cantor, donados por la esposa
de su administrador, Armando Delfino.
Además,
fuera de las salas se exponen premios recibidos por Iris Marga, recordada
y querida ex presidenta de la Casa del Teatro, y muchas fotografías
de artistas argentinos.
DIRECCIÓN:
AV. SANTA FE 1243 – CIUDAD DE BUENOS AIRES – ARGENTINA
TELÉFONO: (01) 4811-7678
HORARIO: VISITAS GUIADAS DE LUNES A JUEVES, SOLICITAR TURNO POR TELÉFONO.
FUENTES:
varias.
Caracteres:
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