CERVECERÍA
/ CONFITERÍA MUNICH
BREVE HISTORIA
Por
Elena Luz González Bazán especial para Villa Crespo
Digital
2
de enero del 2013
A
principios de los 70, la tradicional Cervecería Munich cerraba
sus puertas. Este fue un lugar de reunión de los ciudadanos
en sus paseos por la Costanera Sur durante la primera mitad del
siglo XX, donde se encontraba el Balneario del Sur.
Luego
de ese tiempo, y ya cerrada, la cervecería tendrá
como destino el Museo de Telecomunicaciones, en la actualidad, a
partir del 2002, es restituido al Gobierno de la Ciudad de Buenos
Aires y hoy se encuentra el Centro de Museos de Buenos Aires.
El
edificio fue construido por el arquitecto húngaro Andrés
Kálnay.
En
el portal porteño se afirma que cuando analizaron el destino
del inmueble comprendieron que: Tanto por su historia como por su
particular morfología, el edificio ofrecía posibilidades
de llevar a cabo múltiples actividades de interés
cultural. Una perspectiva que, potenciada por su inserción
dentro del perímetro que abarca el Programa de Recuperación
de la Ribera y la Reserva Ecológica, refuerza los objetivos
de la Dirección General de Museos.
En
cuanto a su Auditorio que está ubicado en el subsuelo de
la Munich, permite ofrecer conferencias, encuentros, foros, seminarios
y jornadas afines con los grandes temas que conciernen a nuestro
quehacer cultural. Los jardines que lo circundan son aptos para
la realización de actividades ligadas a disciplinas artísticas,
favoreciendo la comunicación con el público.
Las
metas que se propusieron fueron: difundir los aspectos sustanciales
del patrimonio museístico y gestionar la realización
de emprendimientos conjuntos con otras instituciones. Crear un polo
dinamizador de la actividad social, turística y cultural
de Costanera Sur, jerarquizando el valor arquitectónico e
histórico de la antigua Munich y promocionando la imagen
de Buenos Aires a través de uno de sus lugares característicos:
el, ahora, Edificio de la Munich - sede de la Dirección General
de Museos.
HACIENDO
HISTORIA
Se
encuentra ceca de las actuales torres de Puerto Madero, es un edificio
del siglo pasado. Se inaugura el 21 de diciembre de 1927, este 21
de diciembre pasado cumplió 85 años. Fue indudablemente
un lugar preferencial de la Ciudad de Buenos Aires, donde existía
el ya desaparecido Balneario Municipal de la Zona de Costanera Sur.
Toda
esta historia se remonta nueve años antes cuando, en 1918
se crea un espacio para el esparcimiento durante el tiempo veraniego,
que se dirigió, sustancialmente a las familias que no podían
movilizarse hasta la Costa Atlántica.
Así
empezaron a proliferar los puestos de comida, por lo cual el intendente
dispuso una solución: crear un polo gastronómico y,
al mismo tiempo, prohibir la venta de alimentos fuera de esos lugares.
Como
parte de ese proyecto, el 21 de diciembre de 1927 es inaugurada
la confitería en la avenida de los Italianos 851, tras una
obra que llevó a cabo el arquitecto húngaro Andrés
Kálnay, como lo constatamos más arriba.
Kalnay
se encargó de la construcción del edificio y también
realizó los vitrales, las barandas, las lámparas,
la vajilla y los muebles. Y elaboró los diversos elementos
escultóricos y símbolos pintados en las paredes que
remiten a la cerveza y a la cultura de la ciudad de Munich
La construcción es de estilo art decó, en su menú
se destacaban las comidas y bebidas alemanas (por eso también
se la conoció como cervecería), aunque la cerveza
provenía de Quilmes.
ALGUNAS
DE LAS PERSONALIDADES QUE PASARON POR SUS MESAS:
Leopoldo
Lugones, Alfredo Palacios, Alfonsina Storni, Belisario Roldán
y Juan Manuel Fangio. E, incluso, más de una vez cantó
Carlos Gardel, en los alrededores se armaron estructuras teatrales,
por ellos pasaron una variedad de cantantes, ilusionistas, artistas
de variedades, cómicos y otros. Se lo consideró como
un PASEO CULTURAL.
CONTAMINACIÓN
Y PRECIOS ALTOS
Motivos
de su caída, quienes lo utilizaron por muchos años
fueron los trabajadores que no iban a la costa atlántica
en tiempos de verano, a esto se suma la contaminación del
Río de la Plata que tiene un vertiginoso ascenso. Los precios
van en ascenso, en tal sentido, cierra sus puertas en 1970.
Su destino posterior, como tantos otros edificios servirán
para albergar personas sin hogar.
Luego
se instala el museo de ENTEL, entre 1979 y 2002, posteriormente
pasa a dominios de la Ciudad que tiene su destino final como Dirección
de Museos de la Ciudad.
FUENTES:
gobierno porteño y Wikipedia, fuentes varias.
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