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	INVESTIGACIONES EN EL MARCO DEL TALLER DE PERIODISMO 2005 UN TRABAJO PARA CONOCER, REFLEXIONAR Y ANALIZAR, SUGERIR Y DISCUTIR LA MASONERÍA ARGENTINA   Ricardo Sangregorio Graciela Belardi Alicia Zadicof Delia González Maura Tucci Coordinación: Elena Luz González Bazán Especial para Villa Crespo Digital   17 de abril del 2006                                                                                          Joya masónica Royal Ark Mariner, c. 1678 Orígenes y Reseña Histórica La Masonería es una institución filosófica, filantrópica y progresista. Su origen remoto se halla en los gremios medievales, uno de los cuales era el de los arquitectos, que constituía una poderosa asociación profesional, en que se guardaban los secretos de su arte. La construcción de las grandes catedrales de la Edad Media les dio gran prestigio, y eran sumamente estimados por los reyes y grandes señores. No tenían nada de antirreligiosos, sino que constituían una asociación cristiana que celebraba su fiesta en el día de San Juan. El origen de la masonería moderna podemos establecerla el 24 de junio de 1717 en Londres. Cuando cuatro Logias resolvieron fusionarse en una institución bajo la denominación de Gran Logia de Londres y Westminster, dando así nacimiento a la masonería especulativa o filosófica, en contraposición a la interior, operativa. Hasta el siglo XVII la masonería conserva un sentido religioso, católico o protestante. En sus antiguos estatutos se prescribía que el primer deber de un masón es ser fiel a Dios y a la Iglesia y guardarse de errores y herejías. "Los masones de cualquier país, sea cualquiera la creencia religiosa y el culto que profesen, son miembros de una gran familia, como una es la especie a que pertenecen, la tierra que habitan y la naturaleza que contemplan". Pese a todo, la masonería fue perseguida en algunos tiempos, particularmente por los poderes encolumnados tras la Iglesia Católica Apostólica y Romana, que no comprendió que la Masonería estaba comprometida en la búsqueda de la libertad del hombre como meta suprema y que no buscaba ningún poder terrenal ni sustituir a la Iglesia. La Iglesia habría visto el crecimiento de la masonería y por extensión la habría imaginado como una probable competidora a la hora de relacionarse con los distintos factores de poder. La masonería está esparcida por todo el mundo y en cada lugar adopta las costumbres y tendencias del medio que sean compatibles con sus principios. Así, está generalizada en todas las partes la Masonería masculina, lo que no impide que en algunos países se practique la Masonería mixta y/o femenina. Se divide a sus integrantes de acuerdo al nivel de conocimientos, por tres grados que se denominan: Aprendices, Compañeros y Maestros, tomando está denominación de aquella época de constructores y albañiles. Entre los masones se llaman hermanos. Muchos de los elementos y herramientas utilizadas por aquellos albañiles forman parte de la simbología masónica. Los masones reconocieron en Dios al Gran Arquitecto del Universo y tomaron como símbolo y atributos a los instrumentos de trabajo, como la escuadra y el compás. Los símbolos transmiten ideas. No ocultan el mensaje de la masonería, simplemente velan a todos aquellos que se quieran acercar a contemplarlos. La escuadra no puede tener ni 79° ni 91°, tiene 90° exactos. Es inflexible. La unión de la escuadra y el compás está marcando una dicotomía o una confusión. Si bien la escuadra es inflexible, el compás habilita a todo tipo de tolerancia y amplitud. También es muy importante en la simbología masónica el número 3, Como ejemplo, podemos citar los lemas: Ciencia-Justicia-Trabajo y Libertad-Igualdad-y Fraternidad. También el triángulo equilátero ha sido considerado como símbolo de la perfección, armonía y sabiduría y por ende de lo celestial y lo divino. Esta simbología se asocia en algunos casos al devenir histórico de los pueblos. Sirva como ejemplo el caso de la creación de la bandera de Cuba. En tertulias de partidarios de la causa separatista, se conoce que Narciso López, francmasón, propuso para el color rojo el triángulo equilátero; la estrella de cinco puntas significa la perfección del maestro masón: la fuerza, la belleza, la sabiduría, la virtud y la claridad. Están representados en este pabellón no solo el tres (tres franjas azules) sino también los otros dos números simbólicos de la masonería, el cinco (resultado de la suma de todas las franjas) y el siete (agregando al número de franjas el triángulo y la estrella). Es tradición y conducta de los masones no revelar el nombre de sus "hermanos". Lo que sí hace la Masonería, es admitir la condición masónica de aquellos que ya fallecieron y esto sólo después de años. Así podemos saber que fueron masones muchas personalidades de la Historia. Filósofos como Voltaire y Goethe; músicos como Beethoven, Hayden y Mozart; genios rectores como Federico, el Grande; Napoleón, Garibaldi, Martí, Miranda y Bolívar; poetas como Víctor Hugo y Byron. La Masonería en la Argentina La influencia de Miranda y su Logia de Caballeros Racionales de Londres en 1798 será fundamental en las luchas de la Independencia Americana. Podemos nombrar como ramificación de aquella a la Logia Lautaro que se constituyó en Buenos Aires en 1812 y de la que formó parte el General José San Martín. A lo largo de la Historia Argentina, basta citar los nombres de los masones que fueron actores importantes en momentos fundamentales del país para ver claramente la participación decisiva de la masonería: Primera Junta de Gobierno: Cornelio Saavedra, Mariano Moreno, Juan J.Paso, Manuel Belgrano, Juan J. Castelli, Manuel Alberti, Juan Larrea y Domingo Matheu. Los personajes mencionados nos sirven para establecer que la masonería pretendía influir en el nuevo proceso político en formación mas allá de la diversidad en el pensamiento ideológico y político de cada uno de sus miembros. Primer Triunvirato: Vicente López y Planes. Asamblea de Año XIII: Carlos de Alvear, Gervasio de Posadas, Juan Hipólito Vieytes, Juan Balcarce. Congreso de Tucumán: Juan J. Serrano, Narciso de Laprida, Juan Martín de Pueyrredón. Constituyente de 1853: Santiago Derqui, Salvador María del Carril, José Gorostiaga, Juan F. Seguí. Presidentes de la Nación: Bernardino Rivadavia, J.J. de Urquiza, Santiago Derqui, Bartolomé Mitre, Domingo F. Sarmiento, Miguel Juárez Celman, Carlos Pellegrini. Parlamentarios Nacionales: Leandro N. Alem, Aristóbulo del Valle, Alfredo L. Palacios, Lisandro de la Torre. Poetas: Hilario Ascasubi, Estanislao del Campo, José Hernández. Cultura y Pensamiento: Esteban Echeverría, Olegario V. Andrade, José Mármol. Ciencias y Educación: Florentino Ameghino, Manuel Montes de Oca, Guillermo Rawson, Cosme Argerich. Artes: Florencio Sánchez, Roberto Casaux, Enrique Muiño, Prilidiano Pueyrredón, Rogelio Yrurtia, Francisco Canaro. La Gran Logia de la Argentina se fundó en 1857 con la Carta Constituyente del Gran Oriente de la República Oriental del Uruguay y su primer Gran Maestro fue el Dr. Roque Pérez. Catorce presidentes argentinos fueron masones (el último de ellos fue Agustín P. Justo). Por lo menos, cuatro de ellos, Pellegrini, Urquiza, Mitre y Sarmiento fueron Grandes Maestros. Mitre fue además, Gran Comendador. Sarmiento alcanzó el Grado 33 pero no el cargo de Gran Comendador. También podemos citar a Alicia Moreau de Justo y a la escritora Norma Mazur que falleció en 2003 y fue una ferviente impulsora de la masonería femenina en la Argentina y que llegó a ser Gran Maestra de la Gran Logia Femenina de Libres y Aceptadas Masonas del Rito Escocés Antiguo y Aceptado de la República Argentina. En los últimos años, a partir de cierta apertura hacia la sociedad, permitiendo que está se acerque a conocer distintos aspectos de la masonería, en nuestro país se ha producido un notable incremento de adherentes a las logias. Según la Gran Logia Argentina de Libres y Aceptados Masones, en 120 logias que actualmente existen en el país, en 1999 la masonería en el país contaba aproximadamente con 5800 miembros; en 2005 esa cifra se incrementó hasta alcanzar los 9000 miembros lo que representa un crecimiento del 55%. Como muestra de esta apertura, podemos citar los visitas guiadas que distintos organismos llevan a cabo para el público en general en lugares como el cementerio de la Recoleta en Buenos Aires, donde podemos encontrar los restos de distintos masones argentinos, además de ser un lugar plagado de simbología masónica en su arquitectura. Objetivos John Truth presenta la francmasonería como "una Asociación universal, filantrópica, filosófica y progresiva, que procura inculcar es sus adeptos el amor a la verdad, el estudio de la moral universal, de las ciencias y de las artes, los sentimientos de abnegación y filantropía y la tolerancia religiosa; que tiende a extinguir los odios de raza, los antagonismos de nacionalidad, de opiniones, de creencias y de intereses, uniendo a todos los hombres por los lazos de la solidaridad y confundiéndolos en un tierno afecto de mutua correspondencia". El masón es consciente que sus obligaciones fraternas de ayudar a los miembros deben ser subordinados a la obligación que debe a Dios, su país y su familia. En países de habla inglesa han fundado hogares masónicos para ancianos necesitados, orfanatos y escuelas. En nuestro país, institucionalmente, la Gran Logia posee un Hogar de Niños en la Provincia de Buenos Aires, allí son criados niños huérfanos. "Pregonamos un Nuevo Humanismo. El de la Fraternidad; el que pueda asumir la responsabilidad de rescatar al hombre medio, al hombre o mujer subsumidos en la inmediatez sin horizontes, al hombre instrumentado como objeto al servicio de oscuros intereses, al hombre que vive el suceso e ignora el proceso." "Los Masones creemos en este tipo de Utopías y queremos esforzarnos para ser protagonistas del cambio y guías de la esperanza colectiva, en el largo y difícil proceso de integración de la América Latina del Siglo XXI." Fragmentos del discurso pronunciado por el Gran Maestre de la Masonería Argentina en la ciudad de Porto Seguro, Brasil, con motivo del 500 aniversario del "descubrimiento" de Brasil. De todas maneras, quedan algunos interrogantes difíciles de responder objetivamente. En el siglo XIX, su proliferación en nuestro continente tuvo como principal argumento la Independencia. Si las sociedades secretas se entienden, vistas a la distancia en la lucha por la libertad, como por ejemplo en Francia y España del siglo XVIII ¿cuál sería el propósito en la actualidad en nuestro país? Si lo que se busca es "un nuevo humanismo", algo que generaría sin dudas una gran adhesión en mucha gente ¿cuáles son las razones para seguir manteniendo el secreto sobre la masonería? El espíritu de cuerpo que caracteriza a la masonería y sus miembros no permite que el resto de la sociedad esté informada sobre sus fines. Sociedades mutualistas, filantrópicas y políticas conformadas en general por clases media alta y alta, mantienen en secreto sus actividades y propósitos y el anonimato de sus miembros hasta cinco años después de su fallecimiento. La inquietud por tratar este tema surgió de una visita guiada al Cementerio de la Recoleta realizada por una integrante del grupo de investigación periodística. Fuentes Historia de la Filosofía de la Ilustración en Inglaterra - 3er Tomo:"Del Humanismo a la Ilustración" de Guillermo Fraile de la Orden de los Predicadores. www.argenpress.info www.clarin.com www.artigas422.com.ar - Logia José Artigas Nro 422 Susana Espósito para www.conozcabuenosaires.com.ar www.launion.com.ar www.brujula.net