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ADOLESCENTES
EN EXTREMA VULNERABILIDAD
Por
Elena Luz González Bazán especial para
Villa Crespo Digital
20
de octubre del 2016
No
hay educación adecuada, los problemas laborales
son crecientes y esta población joven no se siente
que tenga un lugar en el mundo…
Los países que brindan una educación adecuada,
un espacio laboral luego de lograr una capacitación
para poder emprender el camino del trabajo podrán,
sostienen desde los organismos internacionales, una
forma de reducir la pobreza, porque tendrán un
mercado laboral al cual acudir.
ARGENTINA
Las
más afectadas en la Argentina, como suele suceder,
son las mujeres: representan el 24,8 por ciento de los
que no estudian ni trabajan. Las vigentes cuestiones
de clase y género.
A
febrero del 2016, 1.266.000 adolescentes entre 18 y
24 años tienen trabajos informales. Es decir,
no gozan ni de estabilidad ni de cobertura social alguna.
Los desocupados, en total, suman 492 mil y los que no
estudian ni trabajan alcanzan los 903 mil. Las cifras
de fines de septiembre hablan de más de 1.000.000
de jóvenes NI NI. Es decir que hay 2.661.000
jóvenes que están en la informalidad laboral,
sufren la desocupación y no estudian ni trabajan.
Más de la mitad de un universo aproximado de
5 millones de personas.
LOS
JÓVENES NI NI
Este
relevamiento corresponde a la consultora especializada
Adecco que precisa que hay 1.082.400 jóvenes
que se encuentran enmarcados dentro de ese territorio,
alejados del mundo del trabajo y del estudio.
Según
las cifras del informe, en el país hay 4,4 millones
de jóvenes de entre 18 y 25 años, de los
cuales 34,2% trabaja,
26,7% dedica su tiempo a estudiar,
un 10,3% trabaja y estudia y
un 3,3% estudia y busca trabajo.
Pero hay un 24,6% de ellos que no estudia ni trabaja,
de este porcentaje hay un 17,3 que NO ESTUDIA, NO TRABAJA
Y NO BUSCA EMPLEO.
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JÓVENES
NI NI
MERCADO
LABORAL FEMENINO Y DESEMPLEO
El
desempleo femenino en el segundo trimestre del 2016
es del 10,5% y superó el nivel general del 9,3
por ciento. Que dicen los especialistas: ¨no sólo
tienen una mayor dificultad que los hombres para acceder
a un trabajo, sino que además sus empleos son
más precarios. Para el caso de las mujeres, la
tasa de subocupación (aquellas personas que trabajan
menos de 35 horas semanales por cuestiones involuntarias)
fue del 13,9 por ciento, un dato más elevado
que el que registraron los hombres. (9,2 por ciento.
Un 14 por ciento no tiene título secundario o
universitario solicitado, un 10% no está en el
rango de edad, el 5 por ciento afirma que le exigen
idiomas y otros tienen complicaciones con el lugar de
trabajo y la cercanía a sus hogares (3 por ciento).
El 87 por ciento afirma haber tenido alguna experiencia
laboral mientras que el 13 por ciento de los adolescentes
nunca trabajó.
La
falta de estadísticas adecuadas y creíbles
llevó a que esta situación social mejorara
relativamente. Los pobres no bajaron, hoy un 32 por
ciento es pobre… y en los hogares con más
hijos la pobreza trepa entre un 40 al 45 por ciento…
FUENTES:
Informe de Adecco, Indec, organizaciones internacionales
y fuentes propias.
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