MEDIOS
DE COMUNICACIÓN, VIOLENCIA Y RACISMO
LIBERTAD
DE EXPRESIÓN
UNA
EXPERIENCIA GRUPAL
Por
Denise Hemsi, Diego Lanis, Sergio Steinhaus especial para Villa
Crespo Digital
12
de julio del 2013
MEDIOS DE COMUNICACIÓN, VIOLENCIA Y RACISMO
Por
Denise Hemsi especial para Villa Crespo Digital
12
de julio del 2013
La
represión y los asesinatos ocurridos durante la toma del
Parque Indoamericano en diciembre de 2010 y de la comunidad Qom
del Chaco tienen como denominador común al racismo exacerbado.
Y las representaciones mediáticas cumplen un rol fundamental
al naturalizar un imaginario que construye al “otro”
ya sea como violento, sumiso, exótico, diferente o incomprensible.
Florentín Díaz, de 37 años, fue asesinado durante
la violenta represión a los Qom en la localidad de Castelli,
a 300 kilómetros de la capital chaqueña. Los manifestantes
indígenas reclamaban el fin de la violencia y el respeto
a sus tierras según lo establece la Ley de Emergencia de
Tierras de las Comunidades Originarias del país.
Este hecho se suma a las distintas situaciones de discriminación,
violencia y abandono que sufren los pueblos indígenas en
el norte argentino desde hace ya mucho tiempo. Díaz perdió
la vida luego de la violenta represión policial, que según
las autoridades chaqueñas se debió a un accidente
de tránsito. Además hubo más de 50 personas
con heridas de diversa con consideración. En nuestro país
los pueblos originarios son discriminados, silenciados y sometidos
a un genocidio silencioso.
Cuando la que se ve afectada es la propiedad privada, la ocupación
de tierras es una de las acciones más castigadas por el Estado,
como ocurrió también en la toma del Parque Indoamericano.
En este caso el racismo también fue un componente esencial.
Los medios masivos suelen caracterizar a los inmigrantes como dóciles,
peligrosos o amenazantes. Así resurgieron en este caso las
ideas racistas que tomaban a la inmigración regional como
una amenaza, edificándose una frontera entre un “ellos”
y un “nosotros”.Esto quedó en evidencia cuando
el Jefe de Gobierno porteño Mauricio Macri le pidió
a la presidente Cristina Fernández de Kirchner trabajar en
conjunto contra “una inmigración descontrolada y el
avance de la delincuencia y el narcotráfico”.
Se
construye así un imaginario del “otro inmigrante”
distinto, se lo estigmatiza y se lo acusa de ser el culpable de
todos los males. Los sistemas clasificatorios obviamente exceden
a los medios de la comunicación, pero estos operan y colaboran
en su representación. En este sentido, circulan discursos
tanto en la sociedad como en los medios que discriminan al inmigrante
latinoamericano.
El programa “La liga”, emitido el 9 de septiembre de
2008, comienza con una delimitación territorial y étnica
de Buenos Aires en la que su conductor Matías Martín
señala que “los paraguayos están en Retiro,
los peruanos en el Bajo Flores y en el Abasto y los bolivianos en
Lugano y Liniers”. Estos espacios y habitantes potencialmente
caóticos necesitan ser reconocidos, examinados y registrados.
Así circulan discursos que califican a los peruanos como
“vagos, traficantes y usurpadores” y a los bolivianos
como “ignorantes que vienen a robarle el trabajo a los argentinos,
que trabajan muchas horas por muy poco dinero en talleres clandestinos
porque están acostumbrados”.
Los crímenes y la represión que se observaron en el
Parque Indoamericano y con el pueblo Qom nos obligan a pensar la
necesidad de profundizar los debates sobre la apropiación
de la tierra. En este sentido, los medios de comunicación
deben cumplir un rol esencial para ponerle un fin a la persecución
y al racismo que sufren las comunidades originarias y los inmigrantes
latinoamericanos.
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LIBERTAD DE EXPRESIÓN
Por
Diego Lanis especial para Villa Crespo Digital
12
de julio del 2013
La
mentira está organizada. La verdad está dispersa.
La frase atribuida a un poeta no pierde vigencia. La Declaración
Universal de los Derechos Humanos cumple 65 años. Para su
aplicación cabal se necesitan algo más que sólo
palabras. Cuando ellas expresan al poder y sus aliados suenan vacías
de contenido. Esa oración, desnuda como nunca o casi siempre,
quién es quién y él que no puede serlo porque
no lo dejan. Palabras que expresan, contenidos que no contienen
nada. Que tal vez, no digan nada. Más aún, son representaciones
habladas o simbólicas que no significan nada.
Para
ser escuchados, no alcanza con decir y mostrar. Lo razonable sería
movilizar. Allí , radica la dificultad... Para moverse hay
que pensar pero antes analizar. Entonces, me quedó en mi
lugar. De mis derechos y los de los demás. ¿Qué?
Alguien se va a ocupar. ¿Así será?'
Los
derechos humanos básicos son patrimonio de todos. No basta
proclamarlos .Hay que ejercitarlos. El articulo 14 y 14 bis de la
Constitución Nacional protege y tutela nuestros derechos.
La misma como los tratados y pactos internacionales garantizan cuestiones
elementales como el la alimentación, trabajo, vivienda, educación
y salud.
Otros
son los referidos a la libertad de expresión y a las minorías.
Cuando son ignorados o violados sistemáticamente, lo único
que queda es hacer visibles esos reclamos. Judíos, indios,
negros, de vuelta los indios. Pueblos que parieron la historia.
Ahora, ninguneados y desterrados. Obligados a ir hacia ninguna parte.
Medios que no dicen. O callan. En medio de la nada. ¿A quien
protegen?. Su silencio no es gratuito. Tiene precio. El del mercado.
Niños, jóvenes, mayores, con un futuro bastardeado
y sus derechos pisoteados.
Los
funcionarios no funcionan. Los políticos hablan pero no dicen
y gesticulan pero no hacen. Los votantes votan pero no eligen. El
poder y sus socios deciden todo, la gente soporta como puede...
Los centros de enseñanza enseñan a ignorar. Los jueces
condenan a las victimas que también son condenadas por los
victimarios por segunda vez... Las bancarrotas se socializan, las
ganancias se privatizan. Es más libre el dinero que la gente.
La misma está al servicio de las cosas.
¿El
sistema? Está parado en algún recoveco de la memoria.
Del ser y del haber sido. Tal vez, se oculta a la espera de mejores
tiempos. Idos y por venir. Si el medio es el mensaje. Los periodistas
que son. No maten al mensajero. Pensemos en el mensaje. Si trabaja
con honestidad, humildad y decoro quizá pueda nadar abajo
del agua con los ojos cerrados. La sociedad sabe que si lo callan,
no le sirve y que la peor opinión es el silencio. O en palabras
de Albert Camus debe ser fiscal del poder y abogado del hombre común.
Tener siempre presente que los hechos son sagrados y las opiniones,
son libres.
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UNA EXPERIENCIA GRUPAL
Por
Sergio Steinhaus especial para Villa Crespo Digital
12
de julio del 2013
Viví
dos intensas jornadas, fue mi bautismo de fuego en el periodismo,
pude hacer entrevistas, yo le digo espontáneas. Tuve la suerte
que la nieta de Anconetani, con sus ganas de expresarse, me facilitara
la tarea, agregado a ello las personas de las agrupaciones barriales
que todos me contaban y comentaban.
Mi
ansiedad se transformó en realidad. La autocrítica
es que me llevé más por las emociones y no mire fríamente
todo más arriba de los protagonistas.
Diego supo ser el guía, consejero, con toda su experiencia
en la profesión. Cuando alguien se aceleraba, ponía
paños fríos y como comerciante del barrio nunca quiso
influir en nosotros.
Denise
supo captar el horizonte, con su simpleza sabe resumir situaciones,
lugares, personas y hechos.
Javier
tomó nota como nadie de la movida política al ver
la folleteria, personas, escenarios.
Es
un buen equipo donde reina la pluralidad de opiniones, respeto,
experiencia, y conviven sentimientos más racionalidad. Lindo
fue que nos conocimos como personas más allá de las
tareas.
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