Miles y miles de obreros, trabajadores rurales, asalariados, campesinos, docentes, periodistas, con actividad política sindical, activistas y militantes de organizaciones múltiples pusieron el cuerpo en aquellos años…

Juan Carlos Cena

 
 
 

Si supiese qué es lo que estoy haciendo, no le llamaría investigación, ¿verdad?

Albert Einstein

Sábado, 25 Marzo, 2017 22:30

my widget for counting
contador

Usuarios Online  

 

PARTE I / PARTE II / PARTE III / PARTE IV / PARTE V

HISTORIA DE OLVIDOS
CLASE OBRERA: REPRESIÓN Y ENFRENTAMIENTO *
Un surco que atraviesa la historia del Movimiento Obrero

20 de marzo del 2014 *

RESUMEN

Este trabajo es un adelanto del libro Clase Obrera: Represión y Enfrentamiento, investigación que viene desarrollando hace unos años, otros adelantos fueron dados por Historias de las Masacres publicado por este medio.
Lo que sigue es la desmitificación de una posible guerra fraticida entre aparatos militantes, de un lado y otro. Desnuda la realidad de un sistema capitalista que dejó atrás al capital industrial para imponer el capital financiero y bancario. De esta forma la clase obrera, los trabajadores fueron los cazados por la última dictadura militar. Ellos, los trabajadores eran el obstáculo para cambiar, porque la defensa de la fuente de trabajo implicaba la no destrucción de la industria. Esa consigna prevalecía sobre la del aumento salarial.
Es la historia de la clase obrera y el pueblo trabajador que se opuso, resistió y se enfrentó, mientras una parte de la población miraba hacia otro lado e ignoraba o decía no saber sobre lo que pasaba... y otros aplaudían...

BREVE RECORRIDO DE UNA HISTORIA DE REPRESIONES Y MUERTES

Ledesma

“Si creéis que ahorcándonos podéis acabar con el movimiento obrero. El movimiento del cual los millones de oprimidos, los millones que trabajan en la miseria y la necesidad esperan su salvación, si ésta es vuestra opinión, ¡Entonces ahórquenos!
Aquí pisoteáis una chispa, pero allá, detrás de vosotros, frente a vosotros, y por todas partes, las llamas surgirán. Es un fuego subterráneo. No lo podéis apagar”
Albert Spies (ejecutado en Chicago el 11 de noviembre de 1887)

Breves Antecedentes Históricos de las represiones

La historia de nuestro país, así como la de América Latina, está marcada por matanzas, limpiezas étnicas, represiones, torturas, desapariciones; es el terrorismo ejercido por las clases dominantes a través del Estado, imponiendo la dominación, el quebranto y la doblegación de los pueblos, inculcando prácticas culturales de dominación, apropiándose de sus acervos culturales como sus riquezas naturales. Estas fuerzas de opresión instalan el terror, para luego arrasar a sangre y fuego ancestrales creencias religiosas con sus iconografías, ritos, costumbres, usos, maneras de vida, relaciones sociales y económicas, políticas y culturales. Los pueblos conquistados fueron despojados de su lenguaje y escritura implantando el conquistador las suyas, como otra forma de opresión y doblegación.

El objetivo era despojar al otro para someterlo integralmente a través del terror. En ese transcurso se cometieron hechos aberrantes, la ignominia fue una constante que les permitió instalar la esclavitud, la discriminación. La consumación era someter etnias completas, reducirlas para instalar sobre ellos una explotación descarnada. Las crónicas de la conquista así lo marcan, aunque algunos escribas traten de ocultar los hechos. La nuestra, como la de América Latina, es una historia escrita con sangre del habitante sometido. Los relatos de los cronistas, de esa época, cuentan las formas de vida que llevaban nuestras comunidades originarias en todas las regiones del país antes y después de la conquista. Señalando estos relatores cómo fueron sometidos estos habitantes a vejámenes monstruosos; explotados en la mita, en el yanaconazgo, y así. La expansión colonizadora generó un extermino de etnias completas. Un genocidio que duró más de 500 años y que hoy subsiste en la explotación y expoliación de los trabajadores y el pueblo. Cabe preguntarse: ¿Quién habla del holocausto de las comunidades originarias? ¿Quién menciona la desaparición de los onas, de los yaganes y de otras comunidades que van camino a la extinción, como los tobas? La respuestas es la crueldad de los silencios autoritario del opresor, y la complicidad de los amanuenses y quebrados…

En nuestro país, recién en 1813 – Asamblea del año XIII-, se abolió, sólo, la libertad de vientres.

Luego, varios sucesos van marcando los tiempos de las represiones, sin contar las guerras civiles: desde la primera huelga en 1878 de la Unión Tipográfica, los talleres ferroviarios en 1896, la Huelga de los Estibadores en el puerto Guillermo White en 1907, violentamente reprimida, la Semana Roja en 1909, las Huelgas Ferroviarias de principio de siglo, la Semana Trágica en 1919.
Aparecen las primeras organizaciones parapoliciales, estructuras amparadas por el estado que actúan con total impunidad: La Guardia Blanca, Liga Patriótica, Asociación del Trabajo, Comité pro-argentinidad, formadas por elementos de familias adineradas, que profesaban como filosofía de vida la defensa de Dios, Familia y Propiedad. Donde participan Manuel Carlés, Monseñor Miguel de Andrea, el Almirante Domec García, el Perito Francisco Moreno, el general Eduardo Munilla, los radicales Carlos M. Noel, Vicente Gallo y Leopoldo Melo, entre otros

Las Huelgas de 1919 en Mendoza violentamente reprimida por el gobierno de Néstor Lencina, La represión en La Forestal, en 1920, los fusilamientos de La Patagonia, la Masacre de Jacinto Aráoz, en La Pampa; las protestas chacareras de Macachin, La Pampa. El 19 de Julio de 1924 se produjo la masacre indígena de Napalpí, un hecho histórico sangriento que la historiografía tradicional ha ignorado, y que se inserta en la dramática vida de las naciones indígenas que sufrieron diversas formas opresivas y discriminatorias.

La represión a la huelga de la construcción, en 1936. La movilización militar a los trabajadores ferroviarios por la huelga ferroviaria en 1950, la metalúrgica, bancaria, gráfica, entre otras, todas durante el primer gobierno de Perón
Antes del golpe de Estado de 1955 hubo un alerta. El bombardeo criminal al pueblo indefenso en la Plaza de Mayo el 16 de junio. Nuestro Guernica. Es otro hito que debemos recordar y encadenarlo a los otros hechos que se sucedieron. Nada ocurre por casualidad en política. Era el primer ensayo de un proyecto político a implantar. Las Fuerzas Armadas en complicidad con civiles que representaban a la oligarquía más rancia del país, junto a la cúpula de la Iglesia, perpetraron este nuevo avasallamiento a la Nación, el 16 de septiembre de 1955. Comenzaba, dentro del campo social, el desmontaje de una formación ideológica de carácter nacional a través de una brutal violencia.
Hay que ir destacando el comportamiento de la Burocracia Sindical que a los 15 días del golpe se estaban reuniendo con el general Lonardi en la residencia de Olivos. No había llegado Perón a Paraguay y ellos acordaban posteriores sumisiones. Desplazado Lonardi, se reunieron con Aramburu. Comportamiento que se repetirán en todos los golpes, demostrando que siempre fueron y seguirían siendo funcionales al poder, esta funcionalidad es parte de su naturaleza.

En contrapartida, o sea, el reverso de esa actitud traidora fue la constitución de la Resistencia Peronista, organización obrera independiente del partido peronista. Era la repuesta sustancial del movimiento obrero peronista conformada por las bases, es decir, comisiones internas, de reclamos, cuerpos de delegados donde confluyeron otras corrientes políticas.

Hay que señalar tres casos como hechos significativos por esos tiempos: los fusilamientos de trabajadores en los basurales de José León Suárez, en 1956, la intervención a todos los sindicatos y la huelga de 46 días de Unión Obrera de la Construcción en la Ciudad de Córdoba. Esta acción de los trabajadores es un hecho revelador, un acto resistente que ocurre en la cuna donde se gestó el golpe de estado, llamado de la Revolución Libertadora, a pesar de las prohibiciones a toda protesta. Acción dirigida desde la clandestinidad donde la astucia obrera perforó todas las prevenciones represivas.

Llega el gobierno Arturo Frondizi. Hay una continuidad represiva durante su gestión, movilizó militarmente bancarios y ferroviarios y más tarde aplicó el Plan Conintes. Eran tiempos “democráticos” Época de traiciones, de reconversiones y de un gatopardismo perverso.

En 1962 se efectuó la primera Conferencia de Comandantes de Ejércitos Americanos, con la participación del general Juan Carlos Onganía, participante activo del golpe de estado al Dr. Illia. En la V Conferencia de Comandantes de Ejércitos Americanos llevada a cabo en West Point, Ongania afirmaba: ¨(...) Las fuerzas armadas tienen el derecho de intervenir contra los gobiernos que violaron las Cartas Magnas, incumplieran las leyes o dieran solución a los problemas sociales¨

Botero

BOTERO: PARAMILITARES

Trabajo publicado por primera vez el 24 de marzo del 2007

* Juan Carlos Cena es miembro fundador del Mo.Na.Re.FA (Movimiento Nacional por la Recuperación de los Ferrocarriles Argentinos)
- Autor de:
- El Guardapalabras (memorias de un ferroviario)
- El Cordobazo, una rebelión popular.
- El Ferrocidio 1ª edición (agotada)
- El Ferrocidio. 2da edición (ampliada y corregida)
- Crónicas del Terraplén.
- Ferroviarios, una sinfonía de acero y lucha
- Ferrocarriles Argentinos Destrucción / Recuperación
- Numerosos trabajos sobre Movimiento obrero
- Coordinador Escuelas Político Sindicales / 2008 -2009 2013- 2014 ATE La Pampa
- Personal técnico especializado en Planeamiento y Control de Gestión
- ExSecretario general del Personal de dirección (APDFA) de Capital Federal
• Libro de próxima aparición

Caracteres: 9305